
La marca china BYD (Build Your Dreams) ha vuelto a sacudir el tablero del mercado automotriz con el anuncio de dos innovaciones que prometen redefinir la movilidad eléctrica: su sistema de conducción autónoma ‘Ojo de Dios’ y la tecnología de carga ultrarrápida Super e-Platform. Estos avances debutan en sus nuevos modelos Han L y Tang L, que llegarán con precios competitivos y una propuesta tecnológica difícil de igualar, incluso por gigantes como Tesla o Mercedes-Benz.
Una carga más rápida que llenar el tanque
Uno de los principales retos de los vehículos eléctricos ha sido el tiempo de recarga. La nueva Super e-Platform de BYD promete cambiar por completo esa narrativa. Gracias a un sistema de carga ultra rápida de hasta 1.000 kW, los nuevos modelos podrán cargar el 80 % de su batería en menos de 10 minutos. Para ponerlo en contexto, esto es más rápido que el tiempo que se tarda en llenar el tanque de un coche a combustión en una estación de servicio.
Además, esta tecnología permite añadir 400 kilómetros de autonomía en solo 5 minutos, lo que no solo reduce el “estrés de autonomía” que enfrentan los conductores, sino que acerca la movilidad eléctrica a un público más amplio que requiere tiempos operativos eficientes.

‘Ojo de Dios’: autonomía con inteligencia total
La otra gran novedad es el Eye of God, un sistema de conducción autónoma de nivel 3 que incorpora múltiples tecnologías avanzadas. Su funcionamiento se basa en un conjunto de 12 cámaras, 12 sensores ultrasónicos, 5 radares de ondas milimétricas y 2 LiDAR. Esta combinación ofrece una visión 360° del entorno del vehículo, permitiendo detectar objetos, peatones, ciclistas, obstáculos y vehículos en tiempo real con altísima precisión.
Entre sus funciones destacan la conducción asistida en autopistas y zonas urbanas, cambio de carril automático, frenado autónomo de emergencia, estacionamiento automatizado y asistencia en el tráfico. Además, se espera que, con futuras actualizaciones de software, el sistema alcance un nivel superior de autonomía.
Modelos Han L y Tang L: potencia, tecnología y estilo
Los dos modelos seleccionados para recibir estas innovaciones son el BYD Han L y el BYD Tang L. El Han L estará disponible en varias versiones, con autonomías desde los 610 hasta los 710 kilómetros y precios que oscilan entre 30.823 y 39.234 dólares. El Tang L, por su parte, se ofrece como SUV de tracción integral, con un precio base desde 33.625 dólares.
Ambos modelos presentan diseños elegantes, interiores tecnológicos y acabados de alta gama. Incorporan pantallas de control central de más de 15 pulgadas, sistemas de infoentretenimiento conectados y funciones de personalización basadas en inteligencia artificial.
Una estrategia de disrupción global
Estos avances no se limitan al mercado chino. BYD tiene planes concretos para expandir su presencia internacional, incluyendo América Latina y Europa. En Colombia, México, Brasil y Chile ya ha establecido una red de distribución, y estos nuevos modelos serán clave para consolidar su liderazgo en el segmento premium eléctrico.
Además, BYD planea construir más de 4.000 estaciones de carga ultrarrápida en China, y ya negocia alianzas con gobiernos y operadores de infraestructura en otras regiones. Esta visión integral, que incluye vehículos, software e infraestructura, le permite competir no solo con fabricantes tradicionales, sino también con gigantes tecnológicos que están ingresando al sector automotriz.
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¿Una amenaza para Tesla?
Las innovaciones de BYD llegan en un momento clave para el mercado. Tesla, que hasta ahora dominaba en la mente del consumidor como sinónimo de tecnología eléctrica, ha visto caer su valor bursátil tras estos anuncios. Analistas de mercados señalan que BYD, con un enfoque más integral y precios más competitivos, podría arrebatarle buena parte del mercado global en los próximos cinco años.
Lo más significativo es que BYD no sólo apunta al segmento de lujo, sino que sus tecnologías también podrían escalar hacia modelos más económicos, permitiendo una electrificación masiva real, algo que otras marcas aún no logran con eficacia.
Conclusión
BYD vuelve a demostrar por qué es el referente global en innovación automotriz eléctrica. Con sus nuevas tecnologías de carga ultrarrápida y conducción autónoma ‘Ojo de Dios’, la marca no solo ofrece una alternativa a Tesla, sino que plantea un nuevo estándar en eficiencia, seguridad y accesibilidad. Modelos como el Han L y el Tang L no son solo autos, son un anticipo del futuro inmediato de la movilidad.
Fuentes:
Semana
Semana (Economía)