La empresa aeroespacial SpaceX, fundada por Elon Musk, se prepara para lanzar el sexto vuelo de prueba de su sistema Starship, uno de los desarrollos tecnológicos más esperados para la exploración espacial. El lanzamiento está programado para el martes, 19 de noviembre de 2024, con una ventana de lanzamiento que inicia a las 4:00 p.m. CST (5:00 p.m. EST) desde la plataforma de lanzamiento de Starbase en Boca Chica, Texas.
Este vuelo de prueba servirá como un hito importante en el camino hacia la total reutilización de sistemas espaciales, un objetivo clave para garantizar la viabilidad de futuras misiones de larga duración, como las de colonización lunar y marciana. A continuación, detallamos los principales objetivos de esta misión:
Uno de los aspectos más destacados del Starship Flight 6 será un nuevo intento de capturar el gigantesco cohete propulsor Super Heavy B13 mediante el innovador sistema de brazos robóticos conocido como Mechazilla. Este mecanismo está diseñado para atrapar el booster después de que complete su ascenso y lo posicione de manera segura en la plataforma de lanzamiento. De tener éxito, la captura representaría un avance en la estrategia de reutilización total de los cohetes.
Otro objetivo crucial es realizar un relight en uno de los motores Raptor del Starship mientras está en el espacio. Esto es esencial para demostrar la capacidad del Starship de realizar maniobras de “deorbit burn”, cruciales para futuras misiones orbitales, como la misión Artemis 3 de la NASA, que busca enviar astronautas a la Luna. Esta capacidad debe estar correctamente validada para realizar reentradas controladas a la atmósfera terrestre de manera segura.
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Un experimento clave en esta misión incluye la prueba de nuevos materiales para la protección térmica. Se han retirado algunas secciones de los escudos térmicos del Starship para preparar un posible hardware para futuras capturas del propio cohete en misiones venideras. Este punto es crucial, ya que la supervivencia del Starship durante la reentrada depende en gran medida de que su escudo térmico cumpla con los altos estándares requeridos para soportar las temperaturas extremas a las que la nave será sometida.
La misión seguirá un perfil suborbital, con varias fases bien definidas para garantizar el éxito en cada etapa del vuelo:
La fase inicial del despegue comienza con 33 motores Raptor del Super Heavy elevando el sistema del cohete desde Starbase. Tras alcanzar una altitud predeterminada, el booster se apagará y se separará del Starship, que continuará su vuelo. En ese momento, el booster comenzará su retorno controlado hacia la torre de lanzamiento para intentar ser capturado por Mechazilla.
El Starship se dirigirá hacia una trayectoria suborbital que alcanzará aproximadamente la mitad del mundo. Durante este trayecto, uno de sus motores será reencendido para completar la maniobra de deorbitación, lo que permitirá al Starship reingresar en la atmósfera bajo condiciones controladas. La nave realizará una reentrada más pronunciada de lo habitual para testear el control de sus aletas. Finalmente, aterrizará en el Océano Índico.
Este sexto vuelo de prueba es vital para el progreso hacia versiones avanzadas de la tecnología que SpaceX está desarrollando, con miras a las próximas misiones. El resultado de esta misión tendrá un impacto directo en el calendario para futuros vuelos, siendo Starship Flight 7 el siguiente gran hito. Si la captura del booster y el vuelo del Starship en esta misión son exitosos, abrirá la puerta para reducir sustancialmente el tiempo entre lanzamientos y hacer realidad una frecuencia más alta de misiones.
En las últimas semanas, SpaceX ha llevado a cabo varias pruebas de fuego estático tanto del booster como del Starship. Además, el sistema completo de lanzamiento fue ensayado y preparado para el stacking en los días previos al lanzamiento. A nivel regulador, la Administración Federal de Aviación de EE. UU. (FAA) ya otorgó las aprobaciones necesarias para vuelos de prueba, lo que agiliza los preparativos finales del vuelo.
Si la misión Starship Flight 6 se desarrolla de manera exitosa, SpaceX estará en un punto clave para perseguir misiones aún más ambiciosas. El Starship es una pieza central en la futura misión Artemis 3 de la NASA, que busca transportar astronautas a la superficie lunar utilizando esta tecnología espacial avanzada. Además, el éxito fortalecerá las expectativas de misiones hacia Marte en las próximas décadas.
El sexto vuelo de prueba del Starship de SpaceX es una misión crítica en el avance hacia la reutilización completa de cohetes espaciales y en el desarrollo de tecnologías que serán esenciales para futuras misiones a la Luna, Marte y más allá. La capacidad de capturar el booster y relightar motores en plena órbita, combinada con innovaciones en protección térmica, permiten vislumbrar un futuro donde los viajes espaciales serán más frecuentes y eficientes. Este vuelo representa un paso monumental hacia la exploración espacial de próxima generación.
Fuentes: SpaceX.com, NASA
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