
Los patacones, conocidos también como tostones en otros países de América Latina, son una de las preparaciones más populares a base de plátano verde. Su textura crujiente y su versatilidad los convierten en un acompañamiento perfecto para múltiples platos típicos, desde el pescado frito hasta la carne asada. No obstante, uno de los principales retos en su preparación es evitar que queden grasosos, lo que afecta su sabor, textura y valor nutricional.
La importancia del plátano verde
Todo comienza con la elección adecuada del plátano. Para obtener patacones secos y crujientes, es indispensable utilizar plátanos verdes y no maduros. Un plátano demasiado maduro contiene más azúcar y humedad, factores que lo hacen más propenso a absorber aceite. El plátano verde, por su firmeza, permite una fritura controlada y una textura más adecuada para la doble cocción.
Preparación previa: corte y secado
Después de pelar los plátanos, se recomienda cortarlos en trozos de 2 a 3 centímetros de grosor. Enseguida, es fundamental secar los trozos con papel absorbente antes de llevarlos al aceite. Esto evita las salpicaduras peligrosas y reduce la absorción de grasa. Incluso un exceso mínimo de humedad puede interferir en la fritura y comprometer el resultado final.

Doble fritura: la técnica infalible
Una de las técnicas más efectivas para lograr patacones crocantes es la doble fritura. Esta consiste en una primera cocción rápida que permite ablandar el plátano, seguida de una segunda fritura después de aplastarlos. Así se obtiene una costra dorada sin necesidad de cocinarlos más tiempo del necesario, evitando la sobreabsorción de grasa. En la primera fase, fríe los trozos durante 2 a 3 minutos, retíralos, aplástalos con una prensa o plato, y vuelve a freírlos por 1 o 2 minutos hasta que estén dorados.
Temperatura del aceite: clave para el éxito
Otro aspecto crítico es la temperatura del aceite. Idealmente debe mantenerse entre 170 y 180 °C. Si está demasiado frío, el plátano absorberá el aceite como una esponja; si está muy caliente, se dorará por fuera sin cocinarse por dentro. Se recomienda usar un termómetro de cocina o realizar una prueba simple introduciendo un pequeño trozo: si burbujea de forma constante, la temperatura es adecuada.
Después de freír: papel absorbente y sal
Una vez fritos, los patacones deben colocarse sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Algunos expertos recomiendan presionarlos ligeramente con otra servilleta encima para retirar aún más aceite. Otro truco es agregar la sal una vez que los patacones estén fríos o apenas tibios, ya que hacerlo cuando están muy calientes puede hacer que retengan humedad.
Opciones más saludables: horno o freidora de aire
Para quienes buscan una preparación con menos calorías y sin aceite, existen métodos alternativos como el uso del horno o la freidora de aire. En el horno, puedes rociar los trozos de plátano con un poco de aceite en aerosol, hornearlos a 200 °C por 15 minutos, luego aplastarlos y hornearlos otros 10 minutos. En la freidora de aire, se sigue un proceso similar con resultados muy satisfactorios y sin necesidad de freír en aceite.
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Errores comunes que debes evitar
Hay varios errores que pueden hacer que tus patacones terminen blandos o demasiado grasosos. Aquí algunos de los más frecuentes:
- Usar plátanos maduros: como mencionamos antes, retienen más humedad y aceite.
- Freír con aceite reutilizado: esto altera el sabor y la textura final.
- Freír muchos patacones al tiempo: reduce la temperatura del aceite bruscamente.
- No secar bien el plátano: el exceso de agua genera vapor que impide un buen dorado.
Consejos extra para un mejor resultado
Si quieres elevar aún más el nivel de tus patacones, puedes agregarles un toque de ajo o comino al aceite, lo que aportará un aroma y sabor extra. También puedes acompañarlos con guacamole, hogao, queso rallado o carne desmechada, para una experiencia más completa y tradicional.
Conclusión
Preparar patacones crocantes y poco grasosos no es una tarea complicada, pero requiere de atención a los detalles. Desde la elección del plátano hasta la temperatura del aceite y los métodos de cocción alternativos, cada paso puede marcar la diferencia. Siguiendo estos consejos, no solo conseguirás patacones más saludables, sino también deliciosos y perfectos para compartir en cualquier ocasión.
Fuentes: El Espectador, El Tiempo, Semana